Origen e historia de la genética Skunk
La Skunk #1 es una de las principales cepas comerciales de cannabis. Generación tras generación a deleitado a miles de paladares. Probar su sabor es probar el sabor de la historia de los cultivos de los últimos 40 años.
Sin embargo, la popularidad del término “skunk” se ha hecho tal, que en la actualidad parece ser utilizado de manera general para una gran familia de plantas parecidas, pero en realidad distintas.
Es por ello que a lo largo de esta entrada vamos a dar a los amantes del cannabis toda la información necesaria para que sepan cuáles son los orígenes de la familia Skunk, cómo se creó, quiénes fueron sus precursores y otros datos curiosos. ¿Nos acompañas? ¡Vamos!
Los primeros años de autocultivo de cannabis
Lo primero que hay que decir es que la marihuana ha crecido salvajemente desde hace cientos de años. Pero sería a partir del boom del movimiento Hippy y posteriormente en los años 70’ cuando se empezaría a producir un aumento de su consumo con fines recreativos, en especial en los Estados Unidos y en los Países Bajos. Estos últimos siempre precursores de la despenalización y legalización del consumo con fines recreativos tal como veremos más adelante.
Sin embargo, y a pesar de su proliferación, la siembra, las variedades y el consumo eran muy distintos en esa época a como se nos presentan hoy. Casi todos los experimentados en la materia coinciden en el hecho de que por ese entonces no existían casi mezclas, sino que por el contrario se consumían variedades puras. Siendo las más famosas la Acapulco Gold, la Panamá Red, las sativas en Colombia y las indicas de Afganistán, entre otras.
Además de eso, en ese entonces no existían los conocimientos que hay hoy sobre el cultivo y sus ciclos. Motivo por el cual se cosechaba de una manera bastante natural y salvaje, al aire libre y directamente desde las semillas de las propias moñas del consumo.
Esto hacía que la mayoría de las plantas cultivadas en condiciones tan naturales, madurasen tarde, con floración muy lenta, expuestas a plagas y con un rendimiento muy bajo.
Una producción bastante irregular
Los primeros años como hemos dicho todo era improvisación, simplemente plantar la semilla y esperar que la climatología y la suerte hicieran el resto. Esto hacía que la cantidad y la calidad de las primeras cosechas de estas familias puras de cannabis fuesen bastante escasas e irregulares.
A pesar de todos los contras que hemos mencionado hasta ahora, nos atrevemos a decir que la principal razón que motivaba esta irregularidad era que no se sabía absolutamente nada sobre las bondades de la “poda” de la planta. Se dejaba que avanzara en su ciclo natural, sembrada al aire libre, lo que significa polinización y mucha energía de la planta dedicada a producir semillas en comparación a muy pocos cogollos. ¡Una completa pesadilla para los cultivadores de la época.
El arte de la poda mejora los rendimientos por primera vez
Lo que hoy nos parece un ritual obligatorio en algún momento fue la gran novedad que mejoró y cambio para siempre el cultivo casero de cannabis, estamos hablando por supuesto de la poda de la planta en su fase de crecimiento.
Esta técnica desarrollada de manera temprana en la India llegaría a los Estados Unidos a partir del año 1975 de la mano del libro de Jin Richardson titulado “Sinsemilla”. El cual explicaba paso a paso como realizar las podas y eliminar las plantas macho de los cultivos dejando exclusivamente las hembras sin polinizar. Lo que hacía que la planta dirigiese toda su energía hacía la producción de cogollos. La pesadilla inicial, comenzaba a ser un sueño dorado para los primeros cultivadores.
California: la cuna de la familia Skunk
Hemos dicho que en los primeros años se cultivaban principalmente familias “puras” de cannabis. Sin embargo, en la California de los años 70’, un colectivo de cultivadores y consumidores empezarían a revolucionar el mundo del cannabis para siempre.
Estamos hablando de “The Sacreed Seed”, un grupo de cultivadores que a los pocos años alcanzarían gran renombre en todo el país. De hecho sus miembros son internacionalmente conocidos por ser los primeros precursores del cultivo de cannabis en los Estados Unidos.
Su tarea principal era cultivar grandes cantidades de marihuana al aire libre, y posteriormente, de manera completamente arbitraria y artesanal, iban seleccionando lo que consideraban eran los mejores especímenes para estabilizarlos e ir realizando sus cosechas propias.
A estas alturas te estarás preguntando ¿Qué tiene que ver todo esto con el Skunk? La respuesta es simple: todos los historiadores del mundo cannábico coinciden en el hecho de que fue gracias a The Sacreed Seed cuando esta familia de cannabis vería la luz, o al menos los primeros cruces e investigaciones que motivaron su nacimiento oficial posterior.
La intención de The Sacreed era clara: pretendían lograr consolidar una planta que fuese resistente climáticamente pero que creara muchos más cogollos que hojas, es decir, una planta que mejorara notoriamente su rendimiento. Esta combinación tan perfecta nacería toscamente del cruce de dos puros: la Colombian Gold (Sativa) y un Afghani (Indica).
¿Resultado? Los primeros cruces conocidos en occidente entre la activación psicológica de la sativa y el apaciguamiento de la indica. Además de lograr crear una planta robusta de pocas hojas y muchos cogollos. ¡Bingo!
Los años 80: la aparición de las plagas y de la DEA
Las plagas en las plantas siempre han existido de manera natural, más cuando en los inicios no era utilizado ningún tipo de pesticida y las plantas eran sembradas al aire libre de manera indiscriminada.
Sin embargo, con los primeros cruces de plantas y la importación de semillas aparecería un enemigo mortal que amenazaba con destruir los primeros avances logrados por los cultivadores californianos.
Estamos hablando de la Botritis un hongo que literalmente acababa con los plantas de manera acelerada, especialmente con las indicas. Teniendo en cuenta el cruce inicial del que provenía la Skunk esto podía convertirse rápidamente en una epidemia.
Ante esta situación, el importante club californiano de cultivadores tenía que encontrar una solución rápida a la problemática, sin embargo, para complicar aún más las cosas, la política antidrogas de Ronald Reagan iría con todo contra los cultivadores silvestres, cayendo The Sacreed Seed en una redada de la DEA en el año 1982, lo que determinaría el fin del grupo, al menos de manera oficial.
La Skunk #1 llega a Holanda
Años de investigación y cultivo no se irían al traste de manera tan rápida. Uno de los miembros del colectivo lograría emigrar a Holanda, donde desde el año 1975 existía una política blanda con respecto al consumo y compra de marihuana en algunos centros específicos de la ciudad. Esto permitía hablar libremente sobre el tema, y por tanto, continuar con las investigaciónes que se venían haciendo ya en los Estados Unidos.
Con las investigaciones del colectivo bajo el brazo y en un país que permitía el consumo, las cartas estaban echadas. La unión de la experiencia holandesa y la experiencia norteamericana daría como resultado el prototipo final de la verdadera y definitiva Skunk: una planta 75% sativa y 25% indica, nacida del espectacular cruce entre una Afghani Indica, una Acapulco Gold y la Columbian Gold Sativa.
Su exquisito sabor y su increíble robustez, la harían la primera cepa comercial del mundo y la primera ganadora de la Cannabis Cup del memorable año 1988.
La Skunk #1 como es conocida en la actualidad, sigue siendo comercializada por los principales bancos de semillas de todo el mundo. Probar el poderoso sabor y olor de esta increíble planta, es saborear toda la historia de los inicios del autocultivo de marihuana.
Si has llegado hasta aquí, es por qué eres un verdadero consumidor e interesado por la historia del cannabis. Sigamos haciendo crecer está increíble tradición. Déjanos en los comentarios alguna experiencia que hayas tenido con la Skunk #1 que quieras compartir con la comunidad.